Los relojes Timex creen que el tiempo le pertenece a todos. Desde 1854, ningún otro fabricante de relojes ha igualado su capacidad para ofrecer relojes bien elaborados que combinan calidad y asequibilidad. Cada reloj Timex es un testimonio de la legendaria durabilidad y valor de la marca, sirviendo como un recordatorio de que el tiempo está verdaderamente en manos de quien lo lleva.

Relojes Timex: No es un reloj, es un ícono estadounidense

En 1854, los relojes Timex revolucionaron la industria de la relojería al combinar la experiencia europea en relojería con la inventiva estadounidense, haciendo que los relojes fueran accesibles para todos. Rompieron una tradición de 300 años, transformando delicadas piezas de mesa en relojes de pulsera duraderos que podían soportar la prueba del tiempo. Pero lo que realmente distingue a los relojes Timex va más allá de su rica herencia; es cómo sus relojes han evolucionado de simples herramientas para medir el tiempo a compañeros muy apreciados. No importa cómo uno llegue a amar los relojes Timex, ofrecen más que solo la hora; cuentan una historia y sirven como un recordatorio para hacer del tiempo algo propio.